Ellos



¿Qué es la felicidad?

La ausencia de miedo

















jueves, 15 de septiembre de 2011

El Negro


Estoy enroscado en la cama. Sueño que estoy enroscado en la cama. Fumando en la cama. A un lado el último número del Hola. Al otro lado, una botella de ron barato apoyada sobre un libro abierto de Bukowski. Sueño que alguien que soy yo pero no soy yo, porque no tiene cara de gilipollas, arranca el libro de debajo de la botella y se entera de que las cosas no están muy bien últimamente. Y ni siquiera puedo pensar que tengo un sitio en que refugiarme, porque las habitaciones donde vivo no son mías. Últimamente había recibido varias llamadas del abogado de mi ex mujer instándome a abandonar el piso. Le cuelgo siempre al hijoputa. Ni siquiera le pregunto que a dónde quiere que me vaya. El dinero que gano lo gasto en beber, coca y comida basura. Y a Canarias no puedo volver. Allí ya saben que fui un pájaro de cuentas. No puedo volver, por lo menos si no acierto una bonoloto y me instalo entre los pájaros de cuentas. La parada de los taxis que van a Canarias está vacía. Otro que no soy yo pero soy yo, lee al pobre Bukowski. El tipo cuenta que está pinchado, acuchillado, bombardeado. Lo acompaño en el sentimiento. Yo también estoy pinchado, acuchillado, troceado y bombardeado. Suena el teléfono. No me molesto en despertar e ir a descolgarlo. Presiento que es ese hijo de puta de abogado de mi ex. La vida es sueño. Sigo soñando. Rayo sin luz, pájaro sin matiz, pez sin escama y caballo desbocado en el confuso laberinto.
El Negro (colección Zigurat,
ateneo obrero de Gijón, 2000)
Jesús Castellano

1 comentario:

Riforfo Rex dijo...

Probablemente un "incunable"