Ellos



¿Qué es la felicidad?

La ausencia de miedo

















jueves, 31 de diciembre de 2009

Temporada de patos

Osos polares con gafas de sol en un escaparate, mudos. Una niña china con trenzas y patines. Un niño gordo con petardos y padre politoxic. Los pederastas están de enhorabuena, temporada de patos. Hay luces amarillas y grúas altas. Un barco lleno de rubios y suave calima. Luces trepadoras. Monos con uniformes azules, oscuros, porras porros Perro gris; papá Noel sucio feo que sube. Los murciélagos cenan en el casino y duermen en la montaña, en casas grandes con piscinas climatizadas; lujoso hastío. Los lagartos almuerzan en la plaza junto al mar, con mascarilla de sal para la siesta.
Artículo de opinión

domingo, 27 de diciembre de 2009

Las tinieblas de Camus

(...) Seguía a Marcel, eso era todo, contenta de saber que alguien la necesitaba. La única alegría que él le daba era la de saberse necesaria. Sin duda alguna él no la quería. Ni siquiera el amor rencoroso tiene ese rostro ceñudo. ¿Pero cuál es su rostro? Se amaban en la noche, sin verse, a tientas. ¿Existe otro amor que no sea el de las tinieblas, existe un amor que grite a plena luz del día? No lo sabía, pero sabía que Marcel la necesitaba y que ella necesitaba aquella necesidad, que de ello vivía noche y día, sobre todo por la noche, cada noche, cuando él no quería estar solo, ni envejecer, ni morir, con aquel aire obtuso que adoptaba y que ella reconocía a veces en los rostros de otros hombres, el único rasgo común a todos aquellos locos que se camuflan bajo talantes razonables, hasta que les atrapa el delirio y les arroja desesperadamente hacia un cuerpo de mujer paa enterrar en él, sin deseo, todo lo que tienen de espantoso la soledad y la noche.
La mujer adúltera
(El exilio y el reino. Alianza editorial)

jueves, 24 de diciembre de 2009

¿Ser interior?

Niña china con trenzas y patines. Niño gordo con petardos y father politoxic. Desde aquí la navidad es interesante. Hay luces amarillas y grúas altas. Un barco lleno y suave calima. Perro gris papá Noel sucio, feo, que sube. Comida y gato en el patio interior. Vino, Extreme anal, paja. Benedicto recita se baba se limpia se duerme. Vivimos tiempos difíciles dice el rey. Hijosputas.
1 mensaje nuevo:
Que la energìa de éstas fechas nos impulsen a contactarnos con nuestro Ser interior y desde aquí, dejando que él nos guìe, logremos siempre estar en Paz.
Felicidades.
Da un poco de vértigo la soledad, pero a mí me gusta

lunes, 21 de diciembre de 2009

Puto esquirol

Soy un extranjero nacido aquí, un puto esquirol

Mezclo, agito y escribo. No distingo entre realidad y ficción. Que alguien muy listo venga y me lo explique (...)

miércoles, 16 de diciembre de 2009

La trampa de Chéjov

(...) La vida es una trampa enojosa. Cuando un hombre reflexivo alcanza la madurez y es capaz de formarse sus propias ideas, se siente atrapado inevitablemente en una trampa sin salida. En realidad, ha sido llamado de la nada a la vida contra su voluntad y por una serie de azares... ¿Para qué? Quiere conocer el sentido y el fin de su existencia, pero no le dicen nada o le sueltan algún disparate; llama a la puerta y no le abren, y, cuando llega la muerte, también es contra su voluntad.
El pabellón nº.6
A. Chéjov (1860/1904)

miércoles, 9 de diciembre de 2009

¡Gríteme señora, gríteme!

Aminatu H. Diego P. Montar un circo es fácil si payasos y leones comen poco y cobran lo justo.

Me gusta estar en la calle. Pasan cinco ¿intelectuales? Qué es un intelectual. Sombreros, pañuelos en los cuellos y gafas negras con sonrisas seguras. Me miran. Cómo se mira en el espejo un intelectual. Mi índice se desliza por el sudor del día y me pongo cachondo. Una mezcla amarga que me gusta que me excita. Soy yo, coño, soy yo. Mi culo, mi olor de culo. ¿Se olerá el agujero del culo el principito? Claro idiota. El principito es uno más entre nosotros y come pollo con las manos. Cuatro con tenis blancos buscan portero de discoteca ciego, que no pegue. Muse en mi cerebro a través de los cables del Ipod. Cerveza fría del chino en mi mano caliente. Escribo (...)
El Extranjero
Artículo de opinión

lunes, 7 de diciembre de 2009

miércoles, 2 de diciembre de 2009

Líneas verdes en La Mancha

Ya sabía que era él cuando sonó el teléfono, me dije: algo le ha vuelto a suceder, algo ha pasado y ahí lo tienes. No pensé que llamaba para saber de mí, de cómo estaba después de la gripe que me tuvo en cama, en esta misma cama, cinco días. No. Sonó el teléfono y pensé: llama para pedirte ayuda, llama porque necesita a su madre y su dinero. Así que antes del tercer tono ya lo había descolgado. Aníbal me miraba desde su sofá y su luz y su periódico. Levantó la ceja derecha y supe que aquella llamada, una vez más, le disgustaba. ¿Pero qué podía hacer yo, negarle ayuda a mi hijo? (...)
ESPACIO DE LITERATURA EN ESPAÑOL

lunes, 30 de noviembre de 2009

Rey


(...) Magda se durmió. Rey se desveló. Al fin tuvo que botarse una paja él solito. Puso la mano izquierda sobre las nalgas de Magda, y eso fue suficiente para descranearse un poco. Magda dormida boca abajo ni se enteró. Enseguida Rey tuvo su orgasmo y emtonces pudo controlarse y dormir.
Cuando despertó al día siguiente, Magda se había marchado. La puerta estaba abierta. "¿Qué le pasará a esta loca? Está en alguna volá extraña y no quiere que yo lo sepa", pensó. Se quedó un rato remoloneando en la colchoneta, con la tripa pegada al espinazo, como siempre. Ésos eran sus entretenimientos favoritos: nada que hacer, remolonear, dar vueltas y más vueltas, dejar que el tiempo pase, y tener hambre. "La única propiedad del pobre es el hambre", decía su abuela cuando aún hablaba. Desde pequeño le enseñaron a no darle importancia a esa propiedad. Hacer como si no existiera. "Olvídate del hambre porque porque no hay nada que comer", le gritaba su madre siempre, todos los días, a cualquier hora (...)
El Rey de La Habana (Ed. Anagrama, 1999)

sábado, 28 de noviembre de 2009

Bondage 2012

Mis vecinas tienen una jaula con dos canarios en la ventana y dos pajaritos entre las piernas. Mis vecinas son guapas mujeres hombres que trabajan tarde y salen a la plaza a fumar y reír. Yo también necesito fumar para entender. Necesito maría para descreer lo poco que creo. Para reír cuando quiero llorar. Para negar, engañar y seguir (...)
El Extranjero (artículo de opinión)

jueves, 26 de noviembre de 2009

JuanCadáverOnetti

(...) Yo soy yo, este ser, este muchachito de ellos, triste, distinto, tan inseguro y firme como ninguno de ellos podría sospechar; tan aparte y por encima de todos ellos. Yo soy éste al que miro vivir y hacer, con simpatía, sin exceso de amor, éste de la paciencia cortés e inagotable para cada una de las comedias tediosas y sin gracia en que ellos se empeñan en complicarse para que les resulte inteligible, para preservarse de novedades y desconfianzas. Paseo un jardín cuidado y húmedo, recibo en la cara la lluvia que nada explica, pienso distraídas obscenidades, miro el resplandor en la ventana de mis padres. No quiero aprender a vivir,sino descubrir la vida de una vez y para siempre. Juzgo con pasión y vergüenza, no puedo impedirme juzgar; toso y escupo hacia el perfume de las flores y la tierra, recuerdo la condena y el orgullo de no participar de los actos de ellos.

Juntacadáveres (1964)



lunes, 23 de noviembre de 2009

Borracho un lunes

Ser borracho un lunes está bien, muy bien. Todos trabajan y yo bebo. Escribo. Soy casi feliz. Levanto los brazos y miro al techo. Canto, bailo y miro al cielo. No ordeno. No atiendo. No arreglo mis sentidos. Dejo que el ruido y el silencio me guíen. Dejo me dejo. No explico. No participo. Sólo bebo. Sólo intento escribir sin saber me, sin obligar me. Gafas, hoja, cerveza bolígrafo. Reír, llorar, cagar vomitar. Ser humano está bien si no te lo crees. Ser animal está bien si te lo crees. Los homos sabios dejaron de existir, se fueron, murieron. ¿De qué sirve acordarse de ellos? ¿Leerlos?
Ahora estoy yo y mi cerveza Steinburg. Ahora estoy yo y mi cuerpo lleno de sangre, de ganas. Ser borracho un lunes está bien, mucho mejor que ser, sólo ser, un martes.

jueves, 19 de noviembre de 2009

Shakespeare y la bebida

(...)

MACDUFF
¿Qué tres cosas provoca la bebida?
PORTERO
Pues, señor, nariz roja, sueño y orina. Señor, provoca y desprovoca la lujuria: provoca el deseo, pero impide gozarlo. Por tanto, se puede decir que beber demasiado le crea un equívoco a la lujuria: la hace y la deshace, la excita y la aplaca, la anima y la abate, la pone a su altura y no la pone. Al final, el equívoco se va al sueño y te deja tumbado. (...)
Macbeth (II.iii; ed. Austral summa)

lunes, 16 de noviembre de 2009

Una vida sin principios

(...) Los caminos por los que se consigue dinero, casi sin excepción, nos empequeñecen. haber hecho algo por lo que tan solo se percibe dinero es haber sido un auténtico holgazán o peor aún. Si un obrero no gana más sueldo que el que paga su patrón, le están engañanando, se engaña a sí mismo. Si ganaras dinero como escritor o conferenciante, sería que eres popular, lo cual indica un descenso perpendicular. Esos servicios por los que la comunidad está más dispuesta a retribuir, son los más desagradables de cumplir. Se te paga para que seas menos que un hombre. Normalmente el estado no recompensa a un genio con más benignidad. Incluso el poeta laureado preferiría no tener que ensalzar los incidentes de la realeza. Se le tiene que sobornar con un tonel de vino, y tal vez se aparte de su musa a otro poeta para que beba en ese mismo tonel (...)
Si tuviera que vender mis mañanas y mis tardes a la sociedad, como hace la mayoría, estoy seguro de que no me quedaría nada por lo que vivir. Confío en que jamás venderé mi primogenitura por un plato de lentejas; lo que pretendo sugerir es que un hombre puede ser muy trabajador y en cambio no emplear bien su tiempo. No hay mayor equivocación que consumir la mayor parte de la vida en ganarse el sustento. Todas las grandes empresas se automantienen. El poeta, por ejemplo, debe alimentar su cuerpo con la poesía al igual que la máquina de vapor del aserradero alimenta sus calderas con las virutas que produce. Debéis ganaros la vida amando. Pero lo mismo que se dice de los comerciantes que noventa y siete de cada cien fracasan, así la vida de los hombres medida por este patrón es generalmente un fracaso y se puede predecir el desastre (...)
Haber nacido heredero de una fortuna y nada más, no es nacer sino nacer muerto. Que a uno lo mantenga la caridad de los amigos o una pensión del gobierno, supuesto que se sigue respirando, no importa que hermosos sinónimos se empleen, es entrar en un asilo.
Life without principle (título original; 1863)
Desobediencia civil y otros relatos (alianza editorial)




viernes, 13 de noviembre de 2009

Dismetría

Busco la hoja en mi bolsillo con desesperación, con miedo a que no esté ahí. Quiero escribir que dos negros jóvenes pasan y me miran y que una blanca camina y su cadera sube más del lado izquierdo. Estoy con Pedro Juan y su Rey de la habana con su pinga gorda repartiendo leche. Estoy con Rey y con Magda llenos de mierda y de hambre y de templadera. Una mosca en la mesa bebe mi vino blanco. ¡Salud! Pasa un viejo y sus brazos al caminar cuelgan y se balancean como los míos. ¿Seré así de mayor? ¿Mono petudo como él? Pasa una silla de ruedas con una mujer sentada que abre la boca, mira perdida y el sol le brilla en el cráneo. Empujan la silla dos que no están. Son las tres de la tarde, hace calor y todos los comensales del mundo se emborrachan.

miércoles, 11 de noviembre de 2009

Pescado fresco

¿Naira? No. ¿Nuria? No. Naira, sí, Naira. Así se llamaba aquella chica, la pescadera; Naira. Qué brazos tenía. Uno de sus antebrazos era como uno de mis muslos, daba un poco de miedo. Podías imaginar muy fácilmente que, aunque te cogiera la polla con cuidado, algo de daño te iba a hacer (...)
Pescado fresco (fragmento)

domingo, 8 de noviembre de 2009

Escritor puta

(...) Un escritor es como una puta. Utilizas a una puta y luego has terminado con ella.
Creen que si los escritores sufren serán mucho mejores. Eso es pura mierda. El sufrimiento es exactamente igual que cualquier otra cosa: si ter dan demasiado, al cabo de un tiempo puedes hundirte. Es el intento de escapar del sufrimiento lo que crea grandes escritores: te sientes tan bien que haces que los lectores se sientan bien.
Hijo de satanás (1990)

viernes, 6 de noviembre de 2009

¿Truco o trato?

(...) Bebo solo y me gusta. Soy de corazón alcohólico. No me importa que me miren mientras me transformo. Es parte del juego. De éste y de cualquiera. Mirar y ser mirado. Ser bueno, malo y regular. Mentir. Asumir un pulso débil y buscar uno agitado. Quererme y despreciarme. Dar, recibir y escribir (...)
El Extranjero
Artículo de opinión

miércoles, 4 de noviembre de 2009

Miller el asesino

(...) Un artista adquiere el derecho de llamarse creador sólo cuando admite que no es sino un instrumento. "¡Autor, creador, poeta! ¡Aún no ha existido tal hombre!". Así habló Rimbaud en la arrogancia de su juventud. Pero estaba proclamando una profunda verdad. El hombre no crea nada de y por sí mismo. Todo ha sido creado, previsto...y, no obstante, la libertad existe (...)
El tiempo de los asesinos
(Rimbaud, or The Time of the Assassins; 1952)

domingo, 1 de noviembre de 2009

En blanco y negro

Mi padre está muerto y mi madre necesita oxigeno extra para vivir. Mi padre dejó un bonito cadáver y mi madre dejará uno horrible. Amargas arrugas y porosos huesos. Artrosis y desconfianza. Mala hostia y desesperanza. Tripas adictas a la nicotina y a la tristeza. Mi padre está muerto y yo tengo tres fotos. Mi madre fuma y yo la veo en blanco y negro. Mi madre no sabe llorar y yo tampoco.

sábado, 31 de octubre de 2009

Amistad animal

(...) En mi infancia se me conocía por mi carácter dócil y bondadoso. Era tan llamativa la ternura de mi corazón que me convertí en el hazmerreír de mis compañeros. Sentía una particular atracción por los animales, de los que mis padres me permitieron tener en casa una amplia variedad. Con ellos pasaba casi todo el tiempo, y nunca era más feliz que cuando les daba de comer y los acariciaba. Esta peculiaridad de mi carácter creció conmigo y, ya de adulto, fue una de mis fuentes principales de placer. A quienes han cuidado con afecto a un perro fiel y sagaz apenas si necesito explicarles la naturaleza o la intensidad de la satisfacción que uno obtiene. Algo hay en el amor desinteresado y abnegado de un animal que llega directamente al corazón de quien con harta frecuencia ha comprobado la amistad mezquina y la muy frágil fidelidad de las propias personas.
El gato negro

miércoles, 28 de octubre de 2009

Reseña para la ensalada 2

Tamaño de fuente"(...) no sé dónde estaría ahora si no hubiera dado con ella. En mis planes nunca estuvo tener hijos, eso es cierto, pero una cosa siempre lleva a la otra: o tienes perro o tienes hijo; y Julia es alérgica a los perros". Así de desasidos de cualquier ilusión se muestran los personajes contenidos en el libro de 16 relatos titulado como uno de ellos, Ensalada de canónigos, de José Ramallo, que acaba de publicar Ediciones Idea. (...)

martes, 27 de octubre de 2009

El vidente hambriento


11/04/2012
Un fantasma, eso es lo que parecía, un esqueleto, un moribundo.
Cuando me hablaron de él nunca imaginé que lo encontraría en esa situación.
Sí, es cierto, me habían advertido que no pasaba por su mejor momento, que se encontraba muy delicado de salud física y quizás mental, pero algunos le seguían recordando como el mejor.
Cuando lo vi sentado en aquella cama, con una vieja y roída bata abierta, mostrando sus salientes costillas, el pecho hundido encima, la piel blanca, reseca, las rodillas dos bolas deformes y prominentes destacando en el conjunto que formaban sus escuálidas piernas, los calcetines blancos rotos por los dedos, sueltos, sin tener carne y apenas una tibia finísima donde poder sujetarse. Su rostro enjuto y amarillo, barbudo... a punto estuve de darme la vuelta y salir de aquel oscuro y fétido cuarto, pensando que sin duda me había equivocado de lugar, de persona. Pero no, no me había equivocado, aquella cosa era Basil, el vidente. (...)

viernes, 23 de octubre de 2009

Reseña para la ensalada

Nos pasamos la vida abriendo y cerrando libros en busca de milagros. Quizá nada es comparable con aquellos clásicos que leímos con diecisiete o dieciocho años. Nosotros los de entonces, como decía el poeta, ya no somos los mismos.

Con el tiempo es cada vez más difícil que algo nos sorprenda como nos sorprendió el primer libro de Kafka o de Flaubert que cayó en nuestras manos. Esa sorpresa es aún más improbable desde la cercanía. Hay muchas excepciones que nos siguen enganchando a la literatura, y cada año descubrimos autores clásicos o contemporáneos que nos reconcilian con los argumentos y con las palabras (...)
Texto de Santiago Gil
canariasaldia.com

miércoles, 21 de octubre de 2009

¡Al Abortaje!

Las ratas soplan antes de morder. Sueltan un aliento cálido que adormece, que engaña, como los curas. De hecho no veo muchas diferencias entre las ratas y los clérigos cristianos. Unos soplan antes de morder y otros soplan antes de violar. Pasan la manita sobre el niño de turno y los padres consienten. No hay problema, aquí está a salvo de sí mismo, sólo se masturbará si nosotros se lo pedimos. Sólo será un gran hijo de puta si nosotros se lo enseñamos. Sólo se contaminará con nuestra basura, la del resto del mundo ni la olerá, no le importará. Los pobres son más pobres si los miras de frente, si te pones a su altura, pero desde arriba no es lo mismo, no los hueles. Nuestro Señor viste de oro y seda y tiene la nariz taponada (...)
Artículo de opinión
El Extranjero

lunes, 19 de octubre de 2009

Hablar menos

Resistir y sumar. Hablar menos y escribir más. Hablar menos y escribir más.
No dejar que el monstruo me domine. No ignorarlo. No olvidarlo. Sólo hacerle saber quién manda. La violencia no está bien vista, pero sé que debo ser tan fuerte por fuera como por dentro. Si vienes con palabras te contestaré con palabras. Si tu puño me señala, los míos se llenarán de ganas, de venas. La violencia no está de moda, pero somos violentos y nos comemos y yo voy a estar listo para el banquete.
Resistir y sumar. Hablar menos y escribir más. No me gustan los niños ni las buenas personas que se creen buenas personas. Las buenas personas no existen porque no hablan, sólo hacen lo que tienen que hacer y se quedan mudas el resto de sus vidas, por eso no reciben premios, porque no venden nada.
No me gustan las cruces ni los crucificados. No me gusta dar las gracias ni arrodillarme. No me gusta el amor de la multitud de violadores. Si vienes de frente te miraré a los ojos. Si por la espalda, mátame, porque a las lagartijas les vuelve a crecer la cola.
Resistir y sumar. Hablar menos y escribir más. Hablar menos y escribir más.

miércoles, 14 de octubre de 2009

El mentiroso

(...)
Me atrajo hacia ella y me besó, luego me retuvo un segundo más para demostrar que su abrazo era sincero, no como el de todo el mundo, sin darse cuenta de que todo el mundo hace lo mismo.
El mentiroso
(Aquí empieza nuestra historia, Alfaguara 2008)

sábado, 10 de octubre de 2009

En la colonia de Kafka

(...)
-Este aparato -dijo, tomándose de una manivela y apoyándose sobre ella- es un invento de nuestro antiguo comandante. Yo asistí a los primerísimos experimentos, y tomé parte en todos los trabajos, hasta su terminación. Pero el mérito del descubrimiento sólo le corresponde a él. ¿No ha oído hablar usted de nuestro antiguo comandante? ¿No? Bueno, no exagero si le digo que casi toda la organización de la colonia penitenciaria es obra suya. Nosotros, sus amigos, sabíamos aun antes de su muerte que la organización de la colonia era un todo tan perfecto, que su sucesor, aunque tuviera mil nuevos proyectos en la cabeza, por lo menos durante muchos años no podría cambiar nada. Y nuestra profecía se cumplió; el nuevo comandante se vio obligado a admitirlo. Lástima que usted no haya conocido nuestro antiguo comandante. Pero -el oficial se interrumpió- estoy divagando, y aquí está el aparato. Como usted ve, consta de tres partes. Con el correr del tiempo, se generalizó la costumbre de designar a cada una de estas partes mediante una especie de sobrenombre popular. La inferior se llama la Cama, la de arriba el Diseñador, y esta del medio, la Rastra.
-¿La Rastra? -preguntó el explorador.


(...)
-Sí, la Rastra -dijo el oficial-, un nombre bien adecuado. Las agujas están colocadas en ellas como los dientes de una rastra, y el conjunto funciona además como una rastra, aunque sólo en un lugar determinado, y con mucho más arte. De todos modos, ya lo comprenderá mejor cuando se lo explique. Aquí, sobre la Cama, se coloca al condenado. Primero le describiré el aparato, y después lo pondré en movimiento. Así podrá entenderlo mejor. Además, uno de los engranajes del Diseñador está muy gastado; chirría mucho cuando funciona, y apenas se entiende lo que uno habla; por desgracia, aquí es muy difícil conseguir piezas de repuesto. Bueno, ésta es la Cama, como decíamos. Está totalmente cubierta con una capa de algodón en rama; pronto sabrá usted por qué. Sobre este algodón se coloca al condenado, boca abajo, naturalmente desnudo; aquí hay correas para sujetarle las manos, aquí para los pies, y aquí para el cuello. Aquí, en la cabecera de la Cama (donde el individuo, como ya le dije, es colocado primeramente boca abajo), esta pequeña mordaza de fieltro, que puede ser fácilmente regulada de modo que entre directamente en la boca del hombre, tiene la finalidad de impedir que grite o se muerda la lengua. Naturalmente, el hombre no puede alejar la boca del fieltro, porque la correa del cuello le quebraría las vértebras.
En la colonia penitenciaria (In der Strafkolonie)
No se conserva la versión manuscrita. Kafka redactó este relato en octubre de 1914, poco después del inicio de la I Guerra Mundial. Kafka lo leyó en público el 10 de noviembre en 1916 en Múnich, fue la única lectura pública en su vida literaria. No se sabe muy bien por qué eligió este relato tan problemático; según algunos informes, la lectura causó un profundo desagrado entre muchos oyentes, algunas personas se desmayaron, otros abandonaron la sala antes de que finalizara la lectura. Fue publicado en la editorial Kurt Woll, Leipzig, 1919. (Cuentos completos, Franz Kafka. El Club Diógenes, valdemar).

miércoles, 7 de octubre de 2009

Viaje a la luna

Escríbeme. Págate una y seguimos.
La castaña se toca la nariz pero no tengo perico. No consumo. Lo tengo más complicado. Se puede follar sin droga, pero es más difícil. Tienes que usar la inteligencia y... es más dificil. A un empericado le importa una mierda su inteligencia, lo que quiere es seguir, no parar. A los feos no les gusta el síndrome de abstinencia. Los medios pollos se compran de noche.
Bajo de la tarima (...)
Artículo de opinión

viernes, 2 de octubre de 2009

Pulp

(...) Al día siguiente yo estaba en mi oficina. Todo parecía estar en punto muerto. Había sido una noche terrible. Había intentado emborracharme para dormir. Pero las paredes de mi apartamento eran muy delgadas. Oí todo lo de la casa de al lado...
-Oye, nena, tengo el nabo lleno de engrudo y si no lo vacío, ¡me va a dar una apoplejía o algo!
-Eso es problemaq tuyo, macho.
-¡Pero estamos casados!
-Eres demasiado repugnante.
-¿Qué? Nunca me lo habías dicho.
-Lo acabo de decidir.
-Pero la leche se me va a salir por las orejas, nena. ¡Tengo que hacer algo!
-¡Pues arréglatelas sin mí, pichatiesa!
-De acuerdo, de acuerdo, ¿dónde está el gato?
-¿El gato? Ah, no, hijo de puta, no, ¡con Tinker Bell no!
-¿Dónde está ese condenado gato? Le he visto hace un minuto.
-¡No te atrevas! ¡No te atrevas! ¡Con Tinker Bell no!

No conseguí coger una cogorza suficiente como para dormirme. Simplemente me quedé allí sentado, sirviéndome copas. No hubo suerte.

Pulp (1994)

sábado, 26 de septiembre de 2009

Hoy traga

Si quieres círculos tienes círculos. Todos juntos, unidos, da igual que no soportes el olor. Eso da lo mismo. La moda es la moda. Ríe hijo de puta. Únete, ríe e intenta ser feliz. No pienses. No dudes. Baila. Mueve el culo blanco y los hombros grises. Bebe cerveza. Bebe lo que sea y no vomites. Hoy no toca. Hoy traga. Sólo eso. No ser y sí parecer. Hoy traga.

jueves, 24 de septiembre de 2009

La hermandad de la uva


(...) Entré en el cuarto de baño para afeitarme. La cara que vi en el espejo era la de un loco de atar. El paso del tiempo ya no traía paz, sino fealdad, ojos surcados de venas, bolsas en los carrillos. Eché un vistazo a la cama deshecha en la que habíamos vivido la imperfecta sesión de amor, las almohadas aplastadas, las sábanas arrugadas. Tenía el mismo aspecto que la cama de mis padres cuando yo tenía siete años, y recordaba que había odiado a mi padre, por el olor rancio de sus puros y por los pantalones de faena tirados grotescamente en el suelo, y que había deseado matarlo.
La hermandad de la uva (1977)

sábado, 19 de septiembre de 2009

Hijoputa

El Sonrisita es gordo, así que le pego con ganas un palmo por encima del ombligo, en el plexo solar, y cae de rodillas a plomo. Al pie de la farola, en la mitad del puente, tose y brilla como un pez globo fuera del agua, pero el hijoputa no deja de sonreír. ¿De qué coño se ríe este cabrón siempre que nos cruzamos? Una patada en la cara y lo tumbo. Siento las llaves moverse, las saco y las coloco entre los nudillos; es jodido ejercer de boxeador sin guantes con unas manos tan pequeñas. Sonríe pedazo de mierda, sonríe... empiezo. Sangre hasta medio antebrazo y un grito y un llamen a la policía. De noche siempre hay cotillas tras las ventanas. Gente aburrida que espera encontrar algo atractivo fuera, en la oscuridad, mientras dentro la fealdad manda. Corro con el puño apretado hasta la puerta de mi casa. Entre los dedos pegamento y temblores. Me cuesta abrir...
Ahora estoy duchado. Mis manos limpias y mi pulso listo. Sentado en el sillón huevo de ikea busco en google Hardcore y Facefacking. Hoy la paja de siete minutos trae extra de placer. La rubia se lo traga todo y El Sonrisita sonríe sin dientes. Puede que hasta me ponga a escribir.

lunes, 14 de septiembre de 2009

Demian


(...) Los poetas, cuando escriben novelas, acostumbran a actuar como si fueran Dios y pudieran dominar totalmente cualquier historia humana, comprendiéndola y exponiéndola como si Dios se la contase a sí mismo, sin velos, esencial en todo momento. Yo no soy capaz de hacerlo, como tampoco los poetas lo son. Sin embargo, mi historia me importa más que a cualquier poeta la suya, pues es la mía propia, y además es la historia de un hombre: no la de un ser inventado, posible, ideal o no existente, sino la de un hombre real, único y vivo. Lo que esto significa, un ser vivo, se sabe hoy menos que nunca, y por eso se destruye a montones de seres humanos, cada uno de los cuales es una creación valiosa y única de la naturaleza. Si no fuéramos algo más que seres únicos, sería fácil hacernos desaparecer del mundo con una bala de fusil, y entondces no tendría sentido contar historias (...)

Pocos saben hoy qué es el hombre. Muchos lo presienten y por ello mueren más tranquilos, como yo moriré cuando haya terminado de escribir esta historia.

No puedo adjudicarme el título de sabio. He sido un hombre que busca, y aún lo sigo siendo; pero ya no busco en las estrellas y en los libros, sino que comienzo a escuchar las enseñanzas que me comunica mi sangre. Mi historia no es agradable, no es dulce y armoniosa como las historias inventadas. Tiene un sabor a disparate y a confusión, a locura y a sueño, como la vida de todos los hombres que ya no quieren seguir engañándose a sí mismos.

Demian (1919; introducción)

domingo, 13 de septiembre de 2009

Vamos a contar...



Cuarenta y seis y las tetas pequeñas y redondas brillando en la camisilla negra.
-Me llamo Lola.
-Encantado, yo me llamo J.

Todo natural. Vino y cerveza. Mis huevos hinchándose y su sonrisa directa, sin miedo. Minifalda vaquera, divorcio y una hija de dieciséis. Más alcohol.
-¿Importa mi edad?
-No, sólo era por saber...

Dientes en ámbar y maquillaje de doble capa. Mechas y mechones.
-¿A qué te dedicas?
-Actor porno.
-No jodas.
-Sí.

Postre, licores y palabrería. Nubes. Algunos se marchan y se enfría el café.
-¿Y tú?
-Traductora.
-¿De qué?
-De griego y francés.




miércoles, 9 de septiembre de 2009

Doña Perfecta


(...) De pronto se presentaron en la tertulia el juez de primera instancia, la señora del alcalde y el deán de la catedral. Todos saludaron al ingeniero, demostrando en sus palabras y actitudes que satisfacían, al verle, la más viva curiosidad. El juez era mozalbete despabilado, de estos que todos los días aparecen en los criaderos de eminencias, aspirando, recién empollados, a los primeros puestos de la Administración y de la política. Dábase no poca inportancia, y hablando de sí mismo y de su juvenil toga, parecía manifestar enojo porque no le hubieran hecho de golpe y porrazo presidente del Tribunal Supremo. En aquellas manos inexpertas, en aquel cerebro henchido de viento, en aquella presunción ridícula había puesto el Estado las funciones más delicadas y más difíciles de la humana justicia. Sus maneras eran de perfecto cortesano y revelaban escrupuloso esmero en todo lo concerniente a su persona. Más que costumbre, era en él fea manía el estarse quitando y poniendo a cada instante los lentes de oro, y en su conversación frecuentemente indicaba el empeño de ser trasladado pronto a Madriz (...)
Doña Perfecta (1876)

viernes, 4 de septiembre de 2009

jueves, 3 de septiembre de 2009

Simetría


El traje negro de punto le cubre hasta medio muslo. El resto son venas verdes en piernas fuertes y blancas. Pies pequeños en bailarinas de juguete. Cruza el puente sin levantar mucho la vista. Sin mirar al barranco o a los ojos. Quiero morderla y luego hablarle. Saber de dónde viene y adónde va. Pero no la alcanzo. Algún ritmo oriental que no puedo oír se la lleva. Pero no me atrevo. Es demasiado perfecta, y la perfección me asusta.

viernes, 28 de agosto de 2009

Cruzo los dedos

Cruzo los dedos para que pase algo. Miro a mí alrededor buscando pieza. Quiero bronca pero no encuentro. Sólo calles tranquilas. Silencio en bancos de madera verde. Perros que pasean tirando de mujeres mayores. Cucarachas con calor. Palmeras con frío. Fuentes sin agua.
-¡Cállate!, ¿me oyes? ¡Cállate! ¿Podrás estar callada diez minutos; cerrar ésa maldita boca?

Pelear con una mujer siempre me recuerda a mi madre. A puertas rotas y paredes con marcas de nudillos. Ella me enseñó a odiarlas y yo aprendí bien. Nunca le pegué, y es por eso que ahora me sobran unos cuantos puñetazos.

Necesito tirar un par de golpes. Escribir lo que sea. Llenar una hoja de tachones y coger aire profundo. Caminar un buen rato y cruzar los dedos para que pase algo. Para que al llegar a casa ella esté dormida y mi sudor frío. Para que mañana pueda ser otro día y ésta, quizás, otra noche.

miércoles, 26 de agosto de 2009

Ojo surrealista

(...) Al mismo tiempo imaginábamos acostar a Marcelle con las faldas levantadas, pero calzada y vestida, en una bañera a medio llenar de huevos sobre los que ella haría pipí a medida que fuera aplastándolos. Simone soñaba también que yo cogía a Marcelle desnuda en mis brazos, con el culo en lo alto, la cabeza abajo y las piernas dobladas; ella misma, vestida con una bata empapada de agua caliente y pegada al cuerpo, dejando desnudos los pechos se subía a una silla blanca. Yo enervaría sus pechos metiendo los pezones en el cañón de un revólver reglamentario cargado y recién disparado, cosa que, de entrada, nos inquietaría y, luego, daría al cañón el olor de la pólvora. Entretanto, ella derramaría desde lo alto y dejaría deslizar nata líquida sobre el ano gris de Marcelle; orinaría también en su bata o, si la bata se abriera, sobre la espalda o la cabeza de Marcelle en quien, por otro lado, también yo podría mearme. Marcelle me inundaría entonces, porque tendría mi cuello apretado entre sus muslos. También podría hacer entrar mi verga orinante en su boca.
Historia del ojo (1928)

lunes, 24 de agosto de 2009

Trae a mami

Yo pido zumo de naranja, sándwich mixto y una botella pequeña de agua fría. Dani medio bocadillo de pollo y batido de fresa. Son las diez de la mañana y no somos nada originales, siempre pedimos lo mismo. Cuarenta minutos de carrera en el parque La Granja y unas abdominales. Más hambre que las ratas de la playa.

Comemos sin hablar mucho, nos conocemos hace tiempo y no hay necesidad. Los silencios no nos molestan, las tonterías sí. Hace un rato que percibo una cantinela que se está clavando en mi cabeza. Dani ya está con un cortado y yo apurando el agua: “trae a mami, trae a mami”. A nuestra izquierda, en una mesa, un fulano de brazos fuertes y barriga grande empuja a un perro, un pastor alemán joven, negro y juguetón. La supuesta mami mira un escaparate veinte metros más allá, junto a la puerta del bar. Ropa de deporte, bañadores, tanguitas y cholas de colores. Mami está buena, culoncita, tetudita, rica. El tipo se pone cada vez más pesado. “Trae a mami, anda, vete, venga, trae a mami…”. Y el perro sale disparado y muerde la mano de mami y la arrastra hacia su amo. El numerito es precioso, estupendo para grabarlo y ponerlo en un blog de animales haciendo gilipolladas con sus dueños gilipollas, pero a mí me está tocando las pelotas. En las otras mesas algunos se ríen con la historia y entonces el tipo se crece, se rasca los huevos y manda a la mami –que ya estaba de regreso con su guía- de nuevo al punto de partida; otra vez la canción del domador: “a mami, trae a mami, corre…”.

Pedimos la cuenta y pago yo, hoy me toca. Nos alejamos sin prisa pero sin pausa. Dejamos atrás al perro con la lengua fuera y a la mami sin lengua. El amo, el capo, está feliz, ya tiene quien le ayude a controlar a su hembra, pero a mí me duelen la cabeza y el estómago. El próximo día pido manzanilla y unos tapones.

viernes, 21 de agosto de 2009

Pedro Juan el sucio

(...) El viejo me hizo perder el hilo del cuento de Rogelio. Lo escribí hace años. Rogelio había acabado de morir y yo imaginé muchas cosas de su vida. No es un buen cuento. Lo mejor es la realidad. Al duro. La tomas tal como está en la calle. La agarras con las dos manos y, si tienes fuerza, la levantas y la dejas caer sobre la página en blanco. Y ya. Es fácil. Sin retoques. A veces es tan dura la realidad que la gente no te cree. Leen el cuento y te dicen: "No, no, Pedro, hay cosas aquí que no funcionan. Se te fue la mano inventando". Y no. Nada está inventado. Sólo que me alcanzó la fuerza para agarrar todo el masacote de realidad y dejarlo caer de un solo golpe sobre la página en blanco.
Yo, revolcador de mierda (Trilogía sucia de la habana)

miércoles, 19 de agosto de 2009

Gente alfabeta

Más calor y un libro sudando en mi mano izquierda. Llego tarde. Alguien ya me espera en el trabajo y camino atravesando esta ciudad con ritmo de desquiciado, de idiota.
Dos tipos hablan a unos metros. A cada paso los veo más viejos y más indignados. Están parados frente a la entrada de un Banco, y con mala cara se escupen frases de manera alternativa. No se enfrentan, sólo se dicen.
-Aquí lo que pasa es que hay mucha gente alfabeta, mucha, ése es el problema, ése.
-Y que lo digas, tienes toda la razón, toda.

lunes, 17 de agosto de 2009

Otra puta estrella

El suelo aún caliente y el cielo con pajaritos que van de derecha a izquierda. Ofelia se estira, se tumba, saca la lengua y jadea; se rasca una oreja. Debería regar las plantas.

No lo veo claro. No sé si quiero escribir lo que pienso de los aforismos y de sus escritores, o convertirme por un momento en ambas cosas, no sé, pero no encuentro la forma. No tengo las herramientas. No poseo un brillante catálogo de certezas, un currículo. No tengo seguridad. No confío en mí lo suficiente, coño… Bueno, voy a dedicarle seis o siete minutos más al asunto, a ver qué sale.

Conocimiento del que se desconoce. Verdad del mentiroso. Luz artificial.
Escritura que no me gusta, que no me creo porque me asustan los que saben tanto de tantas cosas, los que sentencian sin antes recibir su parte, los jueces, los escritores orgullosos de serlo, encantados de serlo. Los listos.
Mala idea. Fue mala idea tumbarme aquí y fumar. Acabo de picar el anzuelo. No he resistido la tentación, no he podido. Otra puta estrella en el firmamento. Mierda.

Ofelia me muerde la mano, me reclama. Llevo un buen rato sin hacerle caso, así que ahora me toca rascarle la barriga y las tetas. Sólo sé que eso le gusta.

miércoles, 12 de agosto de 2009

Casi siempre Julio



(...) Me daba asco pensar así, una vez más estar pensando todo lo que a otros les bastaba con sentir.

Las puertas del cielo (Bestiario, 1951)

Julio Cortázar

domingo, 9 de agosto de 2009

Otro par de meadas

Puto bar. Cutre modernidad santa crucera. Dos putitas en el centro de la pista. Jóvenes rubia y castaña enfrentadas. Se miran los zapatos, los tacones, se detestan pero se soportan; juegan a lo mismo en diferentes equipos. Guapas y niñas. Guapos y estúpidos. El maricón de camisa blanca corre tras el negro portero de pinganillo en el oído y pollón entre las piernas. Son amigos.
Me siento bien porque en el retrete un hilo rojo no se resiste a mi chorro. Se desliza hasta el fondo, se hunde y gano yo pero ¿y fuera?… todos siguen jugando y perdiendo. Sólo necesito otro par de cervezas y otro par de meadas.









viernes, 7 de agosto de 2009

La razón de Cantinflas

¿Cuántas veces te has parado a ver mierda en la tele? ¿Y cuántos minutos has estado sin rechistar comiéndote esa mierda?



martes, 4 de agosto de 2009

Los muertos

Foto JRamallo
Los muertos no desaparecen, sólo se esconden mientras suenan las campanas.

lunes, 27 de julio de 2009

La religiosa



Ese es el efecto del claustro. El hombre ha nacido para vivir en sociedad: separadlo, aisladlo, sus ideas se desintegrarán, su carácter se transformará, nacerán en su corazón mil sentimientos ridículos; en su espíritu empezarán a germinar los pensamientos más absurdos como las zarzas en tierra inculta. Dejad a un hombre en un bosque, se volverá una bestia; en un claustro, donde la idea de necesidad se une a la de servidumbre, es todavía peor. De un bosque se puede salir, de un claustro no se sale jamás; en el bosque se es libre, en el claustro se es esclavo. Quizá sea preciso mayor presencia de ánimo para resistir a la soledad que a la miseria; la miseria envilece, el retiro deprava. ¿Qué es mejor, vivir en la abyección o en la locura? No me atrevería a decidirlo; pero hay que evitar tanto la una como la otra.
La religiosa (La religieuse; 1780)

martes, 21 de julio de 2009

Feelings

¿Para qué necesito a un feo, apaleado, amargado y mentiroso Jesucristo, si tengo a Nina? Silencio por favor…

lunes, 20 de julio de 2009

Untados y Conformistas

(...): No guapa, tú no vas a ningún lado, aún te quedan unos cuantos polvos más que aguantar, aún no hemos terminado contigo, hay cajas de preservativos gratis que repartir entre Untados y Conformistas; ya sabes que a nosotros, los importantes, nos gusta hacértelo a pelo, como a una esposa ultrajada a la que no nos importa pegar una mortífera enfermedad.

domingo, 19 de julio de 2009

La caja de pandora

-Oye Gabriel
-Qué
-Tú por qué crees que no se hacen buenas películas
-Porque no hay buenos espectadores
-Qué quieres decir
-Inteligentes

viernes, 17 de julio de 2009

Faulkner y el tiempo

Cuando la sombra del marco de la ventana se proyectó sobre las cortinas, eran entre las siete y las ocho en punto y entonces me volví a encontrar a compás, escuchando el reloj. Era el del Abuelo y cuando Padre me lo dio dijo Quentin te entrego el mausoleo de toda esperanza y deseo; casi resulta intolerablemente apropiado que lo utilices para alcanzar el reducto absurdum de toda experiencia humana adaptándolo a tus necesidades del mismo modo que se adaptó a las suyas o a las de su padre. Te lo entrego no para que recuerdes el tiempo, sino para que de vez en cuando lo olvides durante un instante y no agotes tus fuerzas intentando someterlo. Porque nunca se gana una batalla dijo. Ni siquiera se libran. El campo de batalla solamente revela al hombre su propia estupidez y desesperación, y la victoria es una ilusión de filósofos e imbéciles.
El ruido y la furia (1927)

sábado, 11 de julio de 2009

¡Españoles!, Capuchino ha muerto

Bueno, ya está consumada la venganza, y además como le gusta hacerlo al homo sapiens: delante de mucha gente, de muchos gritos.

El magnífico Capuchino ha muerto en una corrida de toros; por asesino, por hijo de puta vaca. ¿Cómo va a dejar el hombre de pelotas apretadas que un toro mate y se quede tan tranquilo? Esto para que aprendan todos los toros del mundo que en España no se juega; bueno, sí se juega, pero con ellos.

¡Españoles!, Capuchino ha muerto... Brindo por ti, Capuchino.

jueves, 9 de julio de 2009

Niñatos

A mí alrededor peinados punk y pantalones apretados; Aviator, Wayfarer: I love New York. Ellos duros folladores. Ellas putas modernas. Poses e impostura en días largos y ociosos de verano…

En casa, ya tarde, él busca en la nevera su yogur de fresa y ella su natilla de vainilla. Esta noche dormirán a pierna suelta, todo marcha bien porque son duros, modernos y niñatos

lunes, 6 de julio de 2009

Últimas tardes...

(...) Porque ¡qué sé yo de los efectos rarísimos que ejerce la pobreza sobre la mente! ¡Qué sé yo del frío, del hambre, de los verdaderos horrores de la opresión que debe sufrir un chico como él si aún ni siquiera le he preguntado qué jornal gana, si nos empeñamos siempre en no querer hablar del jornal de un hombre, sólo de su conducta (pues bien, compañeros, yo afirmo que la conducta de un hombre depende de su jornal) (...)

Últimas tardes con Teresa; 1965

viernes, 26 de junio de 2009

para ser blanco, quiero decir...

-Papá
-Dime cariño
-Se acaba de morir Michael Jackson
-¡¿Qué?!
-Que se acaba de morir Michael…
-Y de qué… ¿cómo?
-De una parada cardiaca
-¿Qué edad tenía?
-La de mamá
-Vaya, me parece muy raro siendo joven y flaco…
-Sí, es muy fuerte papá, muy fuerte
-No sé, cariño, a esa edad la gente no se muere así como así porque se le pare el corazón… habrá sido un pasote de algo, de drogas o de vete a saber qué…
-Ya, sí, yo también lo pensé, seguro que con todo lo que se metió en su vida para estar bien… para ser blanco, quiero decir...
-Bueno, que dios lo tenga en su gloria
-Sí, qué fuerte, qué fuerte... que descanses papá
-Tú también, cariño

miércoles, 24 de junio de 2009

¿Para qué vivir?



(...) También en Marte el hombre había llegado a ser demasiado humano, y no bastante animal. Los hombres de Marte comprendieron que si querían sobrevivir tenían que dejar de preguntarse de una vez por todas: ¿para qué vivir? La respuesta era la vida misma. La vida era la propagación de más vida, y vivir la mejor vida posible. Los marcianos comprendieron que se preguntaban ¿para qué vivir? en la culminación de algún período de guerra y desesperanza, cuando no había respuestas. Pero cuando la civilización se tranquiliza y se calla, y la guerra termina, la pregunta se convierte en insensata de un modo nuevo. La vida es buena entonces, y las discusiones son inútiles.

Crónicas Marcianas; 1946. Ray Bradbury

sábado, 20 de junio de 2009

miércoles, 17 de junio de 2009

domingo, 14 de junio de 2009

Críticos literarios

Cualquiera hoy en día se convierte en crítico literario. Dejan de ser lo que eran: funcionarios, médicos, periodistas, sopladores de vidrio, sopladores de pollas, imbéciles varios… y se hacen Críticos Literarios, que por supuesto suena mucho mejor que todo lo anterior.

Estos humanos necesitan entender lo que leen, dar rápida respuesta a las muchas o pocas dudas que aparecen en sus limitados cerebros cuando se enfrentan (porque ellos siempre se enfrentan) a un texto. Por eso son críticos y no escritores, porque no saben crear, sólo recrear.

viernes, 5 de junio de 2009

El poeta y los lunáticos

[...]
No es que Gale fuese un tipo poco sociable, nada de eso; quería mucho a sus amigos, incluso prestaba atención a sus opiniones y se desvivía por hacerles el favor que fuese, si se lo pedían. Cualquiera que no le conociese bien hubiera supuesto que Gale decía aquellas cosas que decía sólo por oírse, sólo porque estaba encantado con el timbre de su voz. Sus amigos, que en el fondo estaban encantados con él, sabían que no, que había algo más que un encantamiento de Gale con su propia voz; es más, estaban seguros de que ni siquiera prestaba atención a su timbre de voz cuando hablaba.
Lo que hacía imprevisibles las reacciones de Gale era que su voz y su gesticulación se preoducían en muchas ocasiones por nada, por una insignificancia que a él, no obstante, le parecía algo no ya signo merecedor de atención, sino transcendental. Cualquier tontería que a un hombre normal no le causa más que una leve impresión, y hasta una levísima impresión, a Gale le causaba un gran impacto, digno de análisis profundo; el incidente del día; algo que dejaba en un segundo plano todo lo anterior, incluso alguna obligación que hubiese conraído, cualquier compromiso.
Gale se conducía siempre bajo el influjo de la sugestión. Cualquier persona medianamente lógica, por ejemplo, sabe, porque lo percibe, que en un simple seto de un jardín o en una revuelta de un camino hay algo incluso tentador, de una belleza digna de admiración. Pero sigue adelante, tras admitir vagamente aquello. Gale, empero, se detenía ahí; aceptaba la invitación, la sugerencia, no se daba a las vagas admiraciones. La forma de una colina, loa ángulos de una casa, suponían un gran reto para Gale, algo a descubrir. Y a descubrirlo se entregaba intensamente, hasta creer que había descubierto al menos parte del secreto que allí se escondía; feliz, entonces, porque ya podía dar algún nombre a su fantasía. Ésas eran las aventuras de su vida. Y tales eran las razones por las que a veces se sumía en sus ideas con una obstinación propia de la paloma que se dirige a su palomar pase lo que pase. Claro está, necesitaba siempre un punto de partida, una sugerencia propia, una sugestión (...)
El pájaro amarillo (El poeta y los lunáticos)

miércoles, 3 de junio de 2009

Amigos

-Oye Jota
-Qué
-Recomiéndame un libro
-Por qué
-Bueno, quiero leer algo y tú eres mi amigo, los amigos hacen esas cosas.
-Qué cosas
-Pues… aconsejarse
-Vale
(Silencio)
-¿Y?
-Nada
-¿No me vas a decir qué puedo leer?
-No
-Pero por qué
-Porque los amigos también hacen esas cosas
-¿Qué cosas?
-No aconsejar.

domingo, 31 de mayo de 2009

Torquemada En La Hoguera



(...) Hombre de composición homogénea, compacta y dura, no podía incurrir en la tontería de estirar el pie más del largo de la sábana.

En su carácter había algo resistente a las mudanzas de formas impuestas por la época, y así como no varió nunca su manera de hablar, tampoco ciertas ideas y prácticas del oficio se modificaron.
Prevaleció el amaneramiento de decir siempre que los tiempos eran muy malos, pero muy malos; el lamentarse de la desproporción entre sus míseras ganancias y su mucho trabajar; subsistió aquella melosidad de dicción y aquella costumbre de preguntar por la familia siempre que saludaba a alguien, y el decir que no andaba bien de salud, haciendo un mohín de hastío de la vida. Tenía ya la perilla amarillenta, el bigote más negro que blanco, ambos adornos de la cara tan recortaditos, que antes parecían pegados que nacidos allí. Fuera de la ropa, mejorada en calidad, si no en la manera de llevarla era el mismo que conocimos en casa de doña Lupe La de los Pavos; en su cara la propia confusión extraña de lo militar y lo eclesiástico, el color bilioso, los ojos negros y algo soñadores, el gesto y los modales expresando lo mismo afeminación que hipocresía, la calva más despoblada y más limpia, y todo él craso, resbaladizo y repulsivo, muy pronto siempre cuando se le saludaba a dar la mano, por cierto bastante sudada.
Torquemada en la Hoguera

miércoles, 27 de mayo de 2009

Kanarias

[...]

¿Qué es para usted Canarias?:

Palmeras iluminadas de manera artificial. Columpios muertos. Sombras en paredes de casas viejas. Cementerio, psiquiátrico, disfraces. Políticos ganando sin parar en máquinas tragaperras. Tiendas cerradas, cajas de cartón vacías. Besos en blanco, en dibujos, inhumanos. Sol encerrado en escaparates, familias de plástico que juegan sobre arena de mentira, humanos chillones. Una consigna quemada que sube y baja.
No, no puedo responder a una pregunta tan extraña, tan difícil, así que me dormiré. Mañana será otro día, pero no el de Canarias.

Leer artículo

lunes, 25 de mayo de 2009

Reinaldo Arenas



(...) La muerte siempre ha estado muy cerca de mí; ha sido siempre para mí una compañera tan fiel, que a veces lamento morirme solamente porque entonces tal vez la muerte me abandone.

Antes que Anochezca

Reinaldo Arenas

sábado, 23 de mayo de 2009

Bioy Casares




[...]
Muchos opinan que la inteligencia es un estorbo para la felicidad. El verdadero estorbo es la imaginación.
Máscaras Venecianas
(Historias desaforadas; 1986)

jueves, 21 de mayo de 2009

Aforo Limitado

TEA: Territorio Erigido Ad Hoc.

Este espacio de las artes se ha convertido en poco tiempo -por obra y gracia del poder divino, es decir, del poder político-, en un espacio multidisciplinar donde igual contemplas una copia carísima de un Óscar Domínguez, que ves pasar a tu lado la conga de alguna despedida de soltero, que respiras el perfume de las modelos que promocionan una nueva marca de cerveza, de zapatos, o de lo que sea.

El caso es que yo, en lugar de escribir esto, debería estar leyendo a Los Puercos de Circe (Luis Alemany), o viendo la última película de Nina Hurtley, en donde hace de madre madura devoradora de amigos adolescentes de su hijo. I Love you Nina. Luego masturbarme, relajarme, y olvidarme del asunto. Pero no, me explico:
10am de hoy, jueves 21 de mayo del 2009; TEA:
-Hola, qué tal –saludo a una chica que parece despistada.
-Ah, hola.
-Vengo a recoger las invitaciones para el recital de poesía. Yo quiero las del día de Sabina y Benjamín Prado.
-¿Eh?
-Sí, sé que llego pronto, pero es para no quedarme sin invitación, como es aforo limitado.
-Ah… pues… la chica que lleva eso aún no ha llegado, pasa de nuevo en un rato.
-Bueno, vale…
TEA: 11am
-Hola, mira –otra chica con cara de menos despiste-, es que vine antes a buscar las entradas para el recital de Sa… -me interrumpe sin mirarme-.
-No quedan.
-¿Cómo?
-Que ya no quedan
-Pero cómo va a ser eso si estuve aquí hace una hora y no se habían empezado a repartir
-Lo siento, se acabaron, el aforo es muy limitado.
Cara de imbécil. Parece que la nueva burguesía Santacrucera (políticos, empresarios, familiares y amigos de ambas especies) le ha cogido el puntito al TEA, y les gusta mostrarse como gente inteligente además de guapa. Así que para el día del recital han organizado un evento (qué gran palabra ésta) previo, algo de Dolce&Gabbana -ni puta idea de lo que será-. Y de ahí, caminando apenas unos metros -para no sudar-, a oír recitar poemas a los dos progres bohemios ex drogadictos duros; que dejarse ver entre rojillos culturetas te hace subir en las listas de popularidad y, además, lava un poquito tu imagen de niño de papá rico e ignorante.
Sí, en una hora, y sin que nadie hubiese ido a buscar ni una sola entrada, se acabaron. Así siguen funcionando las cosas: Aforo Limitado


lunes, 18 de mayo de 2009

Soliloquio del desaparecido

Sin esperanza y sin alarmas
no sé si voy o permanezco
en esta niebla que me aísla
sin odio ni misericordia

todo lo ignoro del crepúsculo
esa guirnalda de imposibles
vengo de ahogos y estropajos
antres estaba / ya no estoy

sé que he dejado de escaparme
ya no respondo a nadie / a nada
he dicho no como un tañido
como un fragor como un repique

ahora estoy solo y sin hambre
me siento ingrávido y sin sed
no tengo huesos ni bisagras
no tengo ganas ni desgana

podría ser un esperpento
un trozo de alma / un alma entera
los muebles viejos y las calles
el bosque y todos los espejos
en un instante se esfumaron
o se inhumaron / ya no cuentan

[...] hay manos tiernas en que estuve
hay llantos en la lejanía
voces que alzan siete signos
que fueron letras de mi nombre

no sé qué hice / si es que hice

en la memoria falta un río
faltan afluentes / hay apenas
un arroyito que es de sangre

todo se borra / por lo pronto
me desvanezco / vuelvo al limbo
así / sin más / desaparecen
algunos desaparecidos
La vida ese paréntesis